Por Laura Trillo
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¿Reconoces la conexión que hay entre humanos y gatos? ¿sabes por qué es? ¿Hasta qué punto estás involucrado en la evolución de tu alma? ¿Por qué están tus gatos contigo, qué representan para ti, de qué forma puedes ayudarles a estar bien? Debemos ser responsables de nuestra experiencia de vida, para vivirla de forma feliz y consciente, con gratitud por nuestros compañeros de luz, los gatos.
Vamos a intentar dejar de pensar y a situarnos en el presente. Vigila tu respiración, movimientos, ¿eres capaz? Aunque sea por dos segundos, inténtalo. Intenta sentir que tienes un cuerpo, pero que ese cuerpo no eres tú, siente que eres mucho más que eso, un Ser multidimensional en una experiencia 3D. Todo lo que te rodea, incluso tu cuerpo, es sólo un escenario para experimentar una serie de cosas necesarias para la evolución del Alma humana.
Tu trabajo, problemas, situación familiar, de pareja, dolores, dejan de tener importancia cuando sabes que no sólo estás aquí, que esto es sólo una pequeña experiencia dentro de la eternidad y grandeza de nuestra Alma. Si sólo venimos aquí por un ratito, nada tiene demasiada importancia, sobre todo nuestras preocupaciones, miedos, frustraciones. Esta experiencia de vida la hemos escogido nosotros por Amor incondicional. Amamos la Vida, y gracias a nuestra decisión de estar aquí y ahora nos levantamos cada día y hacemos lo que hacemos. Por eso seguimos vivos, por Amor a esta experiencia elegida. De nuevo, deja de pensar y sé consciente de que estás aquí y ahora, en tu cuerpo, vivo, respirando, con un corazón latiendo y todo funcionando. Es un milagro.
Pero dentro de este milagro, estamos sufriendo mucho. ¿Por qué? Tenemos una pequeña trampa en esta experiencia de vida. Tiene muchos nombres, es un niño asustado, separado, una sombra, a la que le damos más valor y fuerza que a nuestro Ser. Este niño asustado vive aquí, en la 3D, y cree que esta es su casa y que no hay nada más. Siempre va a querer convencerte de que esto es lo que hay y que es muy duro, que hay que tener miedo a la muerte y a todo lo que no puedes controlar, va a cuestionar cualquier cosa barriendo siempre para casa, buscando pruebas, y si no lo veo no lo creo, no existe, porque tiene miedo de que haya algo más allá, fuera de su control.
Siempre te hará sentir culpable y va a querer separarte de los demás. Pero tú eres más que eso y lo sabes. No hace falta saber exactamente lo que eres, puedes sentir que eres un Amor muy grande, que se siente en el centro del pecho y emociona sólo recordarlo. Te reconoces en el Amor, es de las cosas que sabes con certeza.
La separación de la Unidad es lo que nos está costando tanto, el habernos individualizado aquí en esta 3D, y luchar contra esa individualidad para volvernos a unir a nuestro origen, la Unidad y el Amor. Nos duele la falta de amor porque venimos de un lugar donde hay un amor infinito, y lo buscamos en la 3D, en otras personas, en lo material, pero no conseguimos llenar ese Amor, siempre falta, y vivimos queriendo ser amados. En los animales encontramos ese amor incondicional pero no sabemos describirlo con palabras, porque es una conexión diferente. Los animales nos están despertando este amor que somos y que tenemos, todos los que estamos ahora lo sabemos, lo hemos sentido. Nuestro corazón ha cambiado gracias a ellos.
Las pistas que nos dan los animales
Para darnos cuenta de lo que pasa, o lo que le pasa a casi todo el mundo, fíjate que cuando un animal nos muestra su amor nos llena, cuando no, lo rechazamos. Al igual que cuando recibimos amor, regalos o halagos de otras personas, o nos rechazan. Confundimos nuestro Amor con otras cosas de esta dimensión y es una sed insaciable. Porque aquí ese Amor no está donde lo buscamos, nos estamos dando cuenta, está dentro de nosotros, en nuestro origen y en lo que somos, por eso estamos volviendo a él, es nuestra casa, no nos hemos separado para siempre, sólo un ratito.
Habrá personas que no quieran cambiar o sanar, porque tienen miedo, porque su tarea es otra, porque no creen en nada de esto, pero tarde o temprano, a su manera, harán el cambio igual, participarán en esto desde su posición. Debemos respetar el proceso evolutivo de cada uno, porque todos y cada uno de nosotros tenemos un papel único aquí en la Tierra y somos parte de su evolución. No debemos ir de sanadores cuando somos nosotros los que debemos ser sanados. Hay que ser muy humilde y respetuoso con los demás, con la evolución de los demás. Evoluciona tú y deja al otro que lo haga a su manera. Siempre se puede ofrecer ayuda, pero vas a ver que no todo el mundo quiere hacerlo como tú.
La empatía de tus gatos
Entendiendo lo que es la vida y la encarnación, habiendo llegado a este punto de conciencia, a mi me da vergüenza preocuparme o quejarme por cosas mundanas y no tan mundanas, que no tienen importancia comparado con la grandeza de todo esto y con la responsabilidad que tenemos con la Vida. Debemos sentir más gratitud por lo que se nos ofrece y más humildad para disfrutar cualquier cosa, saliendo ya de viejos patrones y dejando a un lado lo que no resuena más con nosotros. El mundo cambia con gratitud y amor, desde ti.
Te habrás dado cuenta de que cuando tú estás mal, tu gato también. Ya sabes que los gatos también traen un bagaje de otras vidas y experiencias anteriores, pero además de eso, tu gato es parte de tu energía y lo que le pasa a él, te pasa a ti también. Y lo que te pasa a ti, le pasa a él. Los gatos no son un simple espejo que te muestra cómo estás en realidad. Es todo un conjunto, una suma de ti, tu vida, el entorno, su vida, su energía, todo lo que representa, lo que ha vivido, tus cargas, todo lo que se va transformando. Los gatos viven en el presente y no dejan de trabajar nunca. Una persona y su gato forman un vínculo, como si fuera una tercera consciencia, porque es muy fuerte. Hay gatos que te acompañan en diferentes etapas de tu vida, unos viven más años, otros menos. No hay ni un sólo error en todo este plan Divino o Gatuno.
Si quieres dar un paso en tu evolución como ser humano junto a un compañero felino, hay varias cosas que debes empezar a tener en cuenta, por ejemplo:
-Tu estado emocional, cómo te sientes y por qué
-Cómo está tu gato, si tiene algún problema o enfermedad
Esto es lo mínimo o básico que debes conectar. Cualquier cosa que veas que tiene tu gato, empieza a hacerlo consciente en ti. Enfermedades, cuándo empezaron, qué simbolizan o representan en ti, qué compartes con este gato, en qué os parecéis, también. Qué cosas no te gustan de él o te sacan de quicio, o te suponen un problema. Qué relación tenéis, en qué se basa.
Tu sufrimiento, culpa, miedos, todo lo que te perjudica viene de un plano muy mental y es lo que más nos hace daño y nos bloquea. Muchas veces queremos ser muy espirituales pero nos negamos a no ser racionales. Todo lo queremos controlar y ordenar, entender con la mente, y en esta vida hay muchas cosas que sólo podemos sentir y dejarnos llevar por la confianza en que todo está bien. Todos los bloqueos que sufrimos por no querer vivir esta experiencia, se transforman de muchas maneras, haciéndonos daño a nosotros y a nuestros compañeros de vida. Los gatos no tienen no tienen este sufrimiento constante por esta falta de amor y separación que tenemos nosotros. Ellos están aquí por completo, con una consciencia total, y con una presencia de Amor Incondicional, acompañándonos es nuestro pequeño caos individual, hasta que encontremos de nuevo esa Unidad y ese Amor que parece ocultarse muy bien.
Por tanto, debemos permanecer alerta a todos sus síntomas y comunicaciones, sin llegar a lo obsesivo, pero sí teniendo en cuenta que cuando tu gato se ponga serio, hay que hacerle caso. Bien sea con una enfermedad o con un comportamiento desequilibrado, esto ya significa que hace tiempo que no estamos bien. Gracias a darnos cuenta de esto, empezamos a querer ser responsables, viendo que lo que más amamos está siendo perjudicado de alguna manera por cómo estamos.
Yo siempre digo que este plan Divino es perfecto, al tener como compañeros unas criaturas tan perfectas, adorables, bonitas, que nos roban el corazón, y por ellos hacemos cualquier cosa, hasta evolucionar como seres humanos. Si no fuera por los animales, estaríamos en épocas muy oscuras aún. Ellos son una parte muy importante de nuestra evolución, gracias a su amor, a la conexión que tenemos con ellos, reconocemos que tenemos ese amor ahí y empezamos a abrir el corazón. Al igual que con los hijos, por ellos, somos capaces de cambiar cualquier cosa, sólo para que no salgan perjudicados.
Hablando en concreto de nuestros gatos. Todo lo que te muestren tus gatos, siempre va a ser por tu mayor bien. Cuesta mucho, lo sé, cambiar patrones y vicios que hemos adquirido en la vida. Podemos tardar años en cambiar algo pequeño, pero no pasa nada, dentro de la eternidad, no es nada. Si llegas a entender que tu gato te muerde por tu mayor bien, entonces entenderás esta charla.
Un gato no muerde porque sí, te voy a poner un ejemplo real, que a lo mejor incluso te suena porque te pasa o le ha pasado a alguien conocido. Un gato que muerde a la persona que le toca. La persona insiste, el gato muerde más fuerte. La persona se enfada, regaña al gato porque se frustra, el gato va a más y al final acaba siendo castigado en una habitación “para que se calme”. ¿Qué ha pasado aquí? ¿Tiene razón la persona? ¿Qué necesidad hay de llevar al gato a ese punto, sólo por querer tocarlo? Dentro de la evolución de la humanidad en su relación con los animales, el contacto físico con las manos es símbolo de control y poder sobre el animal. Demuestra también cómo necesitamos controlar al animal en nuestro beneficio, sintiéndonos poderosos, exactamente aquí es el “quiéreme”, intentando cubrir esa falta de afecto, y también queriendo controlar al gato para que sea como nosotros queremos o esperamos que sea, enfadándonos cuando es diferente o hace otras cosas que no son las que esperamos de él. Le castigamos apartándolo porque no conseguimos controlarlo, y nuestro pequeño ego si algo no soporta es no llevar el control. ¿Dónde está tu amor incondicional aquí y tu responsabilidad? No existe. Por eso el gato te ha mordido. ¿Por qué tiene el gato razón? No le has respetado. No te has dado cuenta de que le estás molestando, sólo has mirado por ti, lo que tú quieres y te apetece, y le has llevado a un extremo en el cual el gato ya no te ha permitido más. ¿Qué ocurre cuando eres responsable contigo mismo y estás alerta? Tu gato no te muerde, porque en cuanto ves que le estás molestando, paras de inmediato y te disculpas, entonces empiezas a sentir qué te pasa y por qué necesitas tanto afecto. Y eso es un pequeño hilo del que empiezas a tirar y encuentras muchos caminos recorridos y mal cerrados. O sencillamente entiendes que a todos nos pasa, que necesitamos ese afecto, sentirnos amados, pero el gato te ha querido decir que de esa forma tan egoísta e irresponsable no lo vas a conseguir, ese no es el camino. Por eso ellos siempre tienen razón, aunque sea con una mordida. Y así, con todos los aparentes problemas de comportamiento.
Cuando realmente te implicas, es cuando dejas de pensar en ti y piensas en los demás, haciendo lo que sea necesario para que a tu alrededor sólo haya armonía. Eso sólo lo puedes conseguir desde ti hacia fuera, no controlando lo externo para sentirte bien tú. Es justo al revés. ¿Qué puedes hacer en una situación así como la del ejemplo para que tu relación con tu gato sea más armónica? Respetar a los demás, no abusar, aceptar a cada uno tal como es, dejando de tener expectativas de nadie, disfrutando de la compañía de todo ser vivo esté donde esté, aunque no se deje tocar por ti. ¡Esto ya es un nivel importante! De ser egocéntrico a ser un ser agradecido por la vida. Un gran paso.
Si te implicas, empiezas un camino muy bonito de autoconocimiento junto a tu gato.